Siempre me hizo mucha ilusión tener una casa llena de árboles frutales, hierbas de olor y hortalizas; si bien mi casa es pequeña y no puedo tener una huerta (jajaja), tener un arbolito de higos blancos (un papayo, una flor de mayo y algunas hierbas de olor) me ha hecho muy muy feliz, es una sensación tan mágica el cosechar tus propios alimentos, ¡así que la etapa de sembrar y cosechar te recomiendo no saltártela!
Vamos ahora con la receta para estos hermosos higos blancos cosechados en casa: 
Porciones: 4
Ingredientes:
- 350 grs. de higos frescos
- 4 Cdas. de miel de abeja
- 2 Cdas. de ron
- 4 Cdas. de agua
- 1/2 limón (solo jugo)
- 1 Cda. de azúcar (opcional; sólo si tus higos no están tan dulces)
- 1 varita de romero (opcional)
- Pistaches trozados al gusto
- Yogurt griego al gusto
Procedimiento:
- Lava y desinfecta los higos, una vez listos, parte por la mitad y acomódalos en un sartén, si tienes uno de barro mucho mejor ya que este material es refractario y obtendremos una mejor cocción.

- En un tazón mezcla la miel, el agua, el ron y el jugo de limón.

- Agrega la mezcla de la miel sobre los higos, espolvorea el azúcar, agrega la varita de romero y tapa.

- Coloca los higos en la estufa a fuego medio, una vez que suelten hervor, baja la flama a mínimo y cocínalos tapados por 15 minutos. Pasados los 15 minutos, destápalos y cocina por 5 minutos más ya sin la tapa. Pasados los 5 minutos apaga el fuego y déjalos reposar 10 minutos antes de servir.
Degustación:
Estos higos confitados quedan deliciosos servidos tibios con un poco de yogurt griego y pistaches trozados, o al día siguiente ya fríos sobre una tostada de pan de masa madre y una buena taza de té negro o café. 
Si te sobran, puedes guardarlos en un recipiente, de preferencia hermético en el refrigerador y ocuparlos como topping para tu yogurt de las mañanas, sobre una bola de helado por la tarde o licuarlos y obtener una deliciosa mermelada de higo para tu pan tostado.
