El jueves pasado que fuí al mercado municipal para las compras de la semana, me detuve en un puestecito que más bien era un tablón, un triciclo y un señor. Cuando me acerqué para comprar una calabaza, me percaté de que tenía varios manojos atados debajo de su mesita y le pregunté si era alfalfa, el me dijo que sí y yo, recordando lo mucho que tenía que no la comía no dude en traerme un gran manojo a casa.
Tenía tantos años que no tomaba agua de alfalfa, que ya no recordaba lo deliciosa y refrescante que es. ¡Manos a la obra!
Porciones: 5 1/2 litros
Ingredientes:
- 5 litros de agua
- 1 manojo pequeño de Alfalfa (85 gramos ya deshojada)
- 3 limones
- 1 taza de azúcar
- Hielo al gusto
Procedimiento:
- Lava bien los limones y la alfalfa. Una vez que la alfalfa esta lavada, vas a desojarla para lo que te aconsejo hacer lo siguiente: toma una varita de alfalfa por la punta con una de tus manos y con la otra mano vas a deslizar tu dedo índice y pulgar sobre la rama de arriba a abajo, de esta manera se irán desprendiendo los pequeños manojos de hojitas que forman una rama de alfalfa. Repite este procedimiento con todas las ramitas.
- Pon los racimos de hojitas de alfalfa en un recipiente y desinféctalos. Trascurrido el tiempo de desinfección que diga el producto que ocupes (plata coloidal u otro), escúrrela bien y reserva.
- Licúa la alfalfa junto con el agua en 4 o 5 tandas para que la licuadora no se sature. No dejes muy llena la licuadora ya que al licuar la alfalfa crea mucha espuma y se te puede derramar.
- Licúa bien a máxima potencia y vacía en una jarra, no es necesario colarla. Añade el jugo de los limones, la taza de azúcar y hielo, mucho hielo! Sirve fría.
Degustación: El agua de alfalfa con limón es perfecta a cualquier hora del día, es deliciosa y muy muy refrescante. La alfalfa es una planta herbácea que pertenece a la familia de las leguminosas, entres sus propiedades nutricionales destaca su alto contenido en hierro, ayudando a combatir la anemia al igual que la eliminación de toxinas.