Una de las verduras más complicadas para comer y cocinar es el brócoli. Casi nadie lo come por convicción y en parte creo que se debe a que en la infancia de la gran mayoría, nuestras madres solían prepararlo de manera casi religiosa a vapor, quedando con poco sabor, con una textura blanda, aburrida y haciéndonos sentir lactantes cada que lo comíamos. Ahora bien, te traigo esta propuesta para cocinarlo horneado con lo que lograrás una deliciosa textura crocante y aderezado con un aliño con pocos ingredientes que le aportará mucho sabor. ¡Manos a la obra!
Porciones: 2-4
Ingredientes:
- 1 brócoli mediano (550 grs. aprox)
- 3 dientes de ajo picados
- 1 cda. de aceite de oliva
- 3 cdas. de jugo de limón (3 pzas. aprox)
- 1 cdta. de pimienta
- 1 cdta. de sal
Procedimiento:
- Lava y desinfecta el brócoli. Una vez que lo hiciste, córtalo en floretes descartando la parte mas gruesa del tronco.
- En un recipiente grande pon el ajo picado, el aceite de oliva, el jugo de limón, la pimienta y la sal, mezcla un poco con un tenedor e incorpora el brócoli. Mezcla un poco con tus manos para que el aderezo se impregne en los floretes y deja reposar por 15 minutos, mientras precalienta tu horno a 270°C.
- Transcurridos los 15 minutos, cubre con papel encerado una charola o refractario y acomoda los floretes de brócoli encima del papel. Hornea durante 20-25 minutos o hasta que los tallos se sientan tiernos y luzca ligeramente dorado.
Degustación:
Sírvelo caliente como guarnición para acompañar alguna carne en un día de asador, para acompañar una pechuga a la plancha a la hora de la cena o como botana.
¡NO TIRES EL TRONCO!
Puedes pelarlo con ayuda de un cuchillo para retirar la parte fibrosa y quedarte con el centro del tronco del brócoli que es muy tierno y delicioso. Una ves que retiro el exterior del tronco, lo pico en cubos pequeños o lo rallo, lo guardo en el refri, y lo uso al día siguiente para preparar omelette de brócoli y queso.